Nueva enmienda en Doral por una ciudad más limpia
Por: Diana Bello Aristizábal
La contaminación por residuos sólidos es un tema del que no se habla lo suficiente si tenemos en cuenta que tiene efectos devastadores para el planeta y la salud humana. Pensando en esto, el Consejo de Doral aprobó por voto unánime el pasado 14 de junio una enmienda que aumentaría el valor de las multas por botar basura en sitios no autorizados.
Esta enmienda, aprobada en una primera lectura, se haría a una ordenanza adoptada en el año 2006 en la cual se definió la cuantía que pagarían los infractores de la siguiente manera: 100 dólares por cometer una primera ofensa, 250 por la segunda y 500 por reincidir en esta falta por tercera vez.
De aprobarse esta enmienda en una segunda y definitiva lectura en la próxima reunión del consejo, programada para el 9 de agosto, quienes no depositen correctamente sus desperdicios deberán pagar 1.000 dólares la primera vez, 2.000 dólares la segunda vez y 3.000 por cometer una tercera ofensa.
“La ciudad sigue creciendo y realmente las multas actuales son bastante bajas en comparación con otras municipalidades con características similares a Doral. Por otro lado, hemos notado que este tipo de infracción va en aumento”, dice Rafael Pineyro, vicealcalde de Doral y quien puso este ítem en la agenda, es la motivación principal detrás de esta enmienda.
Y es que, aunque Doral no es una de las ciudades más sucias del condado de Miami-Dade, a juzgar por la basura que vemos en las calles todos los días, muchos aún no son conscientes del impacto de botar un solo papel en el lugar equivocado.
De acuerdo con un informe del Banco Mundial del 2019 denominado ‘Los desechos 2.0’, los residuos mal eliminados traen consigo enfermedades respiratorias, inundaciones y océanos contaminados, entre otras cosas. Lo peor de todo es que si no se toman medidas urgentes, según las proyecciones de este estudio, los desechos municipales a nivel mundial podrían aumentar en un 70% en los próximos 30 años.
A nivel nacional, esto también representa un inconveniente de grandes proporciones como lo reveló un estudio del 2020 dado a conocer en mayo del 2021 por la organización Keep America Beautiful. Entre sus hallazgos, se encontró que había casi 50 mil millones de piezas de basura a lo largo de las carreteras y vías fluviales de Estados Unidos, mientras el 90 por ciento de las personas encuestadas para este estudio aseguraron que la basura es un problema en su estado.
Entonces, surgen dos preguntas: ¿Queremos ser parte de la solución o del problema? Y si consideramos que las ciudades son un reflejo de sus habitantes, ¿qué imagen queremos proyectar a quienes pasen por nuestras calles?
“No podemos esperar a que el problema aumente para comenzar a actuar. Lo que se busca con esta enmienda es ser proactivos a través de acciones contundentes”, explica el vicealcalde, quien añade que la participación ciudadana es clave en este propósito, pues ninguna ordenanza tiene un impacto positivo sin el compromiso de todos.
Pero para que haya compromiso, los residentes deben primero saber a qué se le considera hacer un uso inadecuado de los desechos. Es una violación al código arrojar, colocar o depositar desechos en cualquier cuantía en un espacio compartido, como por ejemplo carreteras y calles, fuera de los contenedores legalmente constituidos para tal fin.
Esto incluye vías fluviales como canales y lagos y también propiedad privada a menos que haya consentimiento previo de los dueños para realizar tal acción. Así mismo, incurre en una infracción quien no sigue las normas establecidas en los parques sobre lo que está o no permitido portar. Por ejemplo, está prohibido ingresar contenedores de vidrio debido al riesgo que este material podría representar en caso de quebrarse.
También se considera una ofensa lanzar residuos en drenajes y cañerías y en el caso de los dueños de negocios como restaurantes acumular basura de forma inapropiada. “Los restaurantes deben tener hasta cuatro contenedores de basura o los que el mánager del establecimiento determine de acuerdo con los desperdicios que se generan. Éstos deben estar en condición sanitaria y ser vaciados varias veces al día para evitar que se sobrecarguen”, aclara el vicealcalde.
Más allá de la enmienda
Aunque el mecanismo que se utilizará para lograr que Doral sea una ciudad más limpia es endurecer las multar por botar basura en los lugares incorrectos con el fin de que los residentes lo piensen dos veces antes de hacerlo, la verdadera ganancia es que las personas entiendan la importancia de cuidar lo que es de uso común.
“Al final todos somos parte de la comunidad”, afirma Rafael Pineyro. Por esta razón, la aprobación de la enmienda irá de la mano de una campaña educativa en español y en inglés a través de la cual el residente podrá conocer no solo los cambios en las multas sino cómo depositar correctamente la basura y a qué línea llamar para denunciar una violación o aclarar dudas.
Hay que decir que, en la Ciudad de Doral, Code Compliance es el departamento que se encarga de hacer cumplir los códigos. Quienes deseen poner una queja, deberán llamar a la línea 305-593-6680 o enviar un correo electrónico a codecompliance@cityofdoral.com
“Detrás de todo esto está mejorar la calidad del medio ambiente y hacer que cada uno de nosotros vigilemos que las reglas se cumplan. La invitación es a que tomen fotos o hagan videos cuando observen a alguien botar basura en el lugar equivocado”.
Por otro lado, por parte de los representantes de la ciudad, de cara a analizar el impacto de la enmienda y de la campaña educativa se determinará cuántas multas se pusieron antes de esto y cuántas después. “Puede que haya un incremento en las multas si la gente es más activa a la hora de denunciar”, concluye Pineyro.