El robo de identidad vuelve a ser tendencia
Por: Diana Bello Aristizábal
Vivimos en un mundo en el cual la línea entre la vida privada y la pública es cada vez más difusa. Quizás por esto, los llamados piratas cibernéticos están más que nunca al acecho robando los datos personales de las personas, tal y como se confirmó el mes pasado.
A mediados de agosto se reveló que un grupo de hackers conocido como USDoD había extraído los números de seguro social, direcciones y nombres de familiares cercanos de miles de millones de personas en Estados Unidos de la National Public Data (NPD), una empresa de verificación de antecedentes.
Se supo de esta filtración de datos por una demanda interpuesta por Christopher Hofmann, residente de California, quien descubrió que su información personal había sido filtrada en la red oscura (Dark Web). Este robo masivo de datos personales fue efectuado con el objetivo de ingresar en cuentas bancarias o solicitar préstamos en nombre de las víctimas.
Y este caso no es el único que se dio a conocer en agosto. A nivel local, miles de residentes de la Florida recibieron una carta del Departamento de Salud estatal en la que se les informaba sobre una filtración de datos, ocurrida el 26 de junio, que incluía sus nombres, fechas de nacimiento, direcciones, información bancaria, resultados de exámenes médicos y números de Seguro Social, entre otros, que serían vendidos en la red oscura, un Internet paralelo foco de negocios ilegales.
Una de las víctimas de este ataque cibernético fue el periodista Harold Santana, quien investigó sobre el tema para una nota televisiva transmitida el 27 de agosto en Telemundo 51 después de haber recibido la carta. En ella, informó que los criminales habían pedido dinero para no publicar los datos personales, lo cual no ocurrió debido a una ley estatal que lo prohíbe.
“El Departamento de Salud me dice que parte de mi información personal ha sido comprometida y me están ofreciendo un servicio de monitoreo de crédito gratuito que el estado de Florida ha pagado por un año y esto les ha pasado a miles de floridanos”, denunció el periodista durante la emisión del noticiero.
Para acceder al servicio, hay que ingresar al sitio web https://enroll.krollmonitoring.com con el número de membresía único de nueve caracteres que aparece en la carta enviada. El plazo máximo para llevar a cabo esta tarea es el 14 de noviembre.
Según el sitio web de The Motley Fool, una compañía de servicios financieros, todo apunta a que casos como los anteriores van en aumento, pues en la primera mitad del año se reportaron 552,000 casos de robo de identidad a la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés). “A este ritmo, el número de casos de robo de identidad para todo el año sobrepasará la cantidad reportada en el 2023 (1,037,000)”, se afirma en la página web.
Ante este panorama, Doral Family Journal habló en entrevista con Evelyn Linares, portavoz de la oficina del director del Sur de la Florida de la Administración del Seguro Social, quien nos compartió cómo protegernos del robo de identidad.
La tarjeta del seguro social se queda en casa
“Yo fui una de las personas que recibió una carta en la que me informaron que mi número de seguro social había sido comprometido”, comienza diciendo la portavoz de la entidad. “Lo primero que yo hice antes que nada (la clave está en actuar rápido) fue comunicarme con los tres buró de crédito – Equifax, Experian y TransUnion- para poner una alerta”.
Cuando estas entidades son alertadas, congelan el número de seguro social, lo cual impide que cualquier persona haga uso de éste. “Si alguien está tratando de buscar información o de ingresar el número del seguro social no podrá hacer nada. No podrá sacar una tarjeta de crédito, solicitar un préstamo ni hacer ningún tipo de transacción”.
Agrega que la tarjeta del seguro social debe permanecer siempre en casa o en un lugar seguro y que el número no debe proporcionársele a nadie por teléfono. En este punto, aclara que la Administración del Seguro Social jamás llama a las personas para ofrecerles una tarjeta ni tampoco solicita los números de ésta, de hecho solo se comunica con los usuarios a través de una carta enviada por correo, una cita concertada o una llamada hecha por los mismos usuarios.
También hay que tener cuidado cuando se está aplicando a un trabajo, pues en ocasiones, las compañías solicitan por Internet el número del seguro social del candidato con el fin de verificar sus antecedentes por medio de otra entidad. Dado que en el caso reciente una de estas organizaciones fue infiltrada, es prudente tener certeza absoluta de si se está aplicando a una empresa real y responsable con sus datos dado que actualmente proliferan los sitios web fantasma.
“La gente se desespera, ingresa la información y luego se la hackean. Entonces yo les diría que se aseguren que se trata de un empleo real pero, al mismo tiempo, yo llamaría a los buró de crédito y les diría que estoy aplicando a un trabajo con tal compañía para que ellos estén en alerta y hablaría con una persona de la compañía para que me confirme que es seguro ingresar mis datos”, aconseja Linares.
Por otro lado, los números del seguro social pueden ser robados por alguien sin autorización para trabajar. Por eso, si usted ve en sus reportes ganancias que no corresponden, haga el reporte al Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés). “Cuando eso pasa, llame al Seguro Social, pida una cita y presente su reporte de impuestos para que nosotros podamos hacer la respectiva corrección”.
Otras recomendaciones
– Establezca contraseñas de acceso complejas; un equivalente de letras altas, bajas, números y símbolos.
– Tenga su software de seguridad actualizado
– No responda correos electrónicos con sus datos personales