El boom de los scooters y la irresponsabilidad de la gente

Por: Diana Bello Aristizábal

 

Los scooters eléctricos son una gran opción de transporte en una economía apretada como la actual. Sin embargo, los accidentes que se han reportado con ellos en varias comunidades de Miami-Dade, Broward y Palm Beach, incluida Doral, han dejado algo claro: se necesita regulación, educación y responsabilidad para tenerlos en las calles de forma segura.

El problema es que eso no está ocurriendo. Si bien los scooters no son nuevos, muchos no están siguiendo las leyes ni adoptando medidas de seguridad en la actualidad para que nadie salga lastimado.

Tan solo en Doral ya se han reportado cuatro accidentes en el 2024. El último sucedió el jueves 21 de marzo en la intersección de la NW 66 calle y la 107 avenida, dejando dos personas hospitalizadas que ya están a salvo. Un adolescente de 16 años en Cooper City, Broward, que manejaba un scooter no corrió con la misma suerte y falleció tras ser impactado por un carro el pasado 18 de marzo.

Casos como los anteriores parecen estar multiplicándose en las calles, especialmente aquellos que involucran a menores de edad. En septiembre del año pasado se registraron tres accidentes en un lapso de 24 horas en los que resultaron heridos niños que conducían scooters o bicicletas eléctricas en Village de Key Biscayne, en Miami-Dade.

Los incidentes motivaron la emisión de una orden de emergencia en febrero de este año según la cual todas las bicicletas eléctricas y scooters motorizados tienen prohibido circular en calles y aceras de la Village a excepción de Crandon Boulevard.

 

Conocimiento, prudencia y regulación

A la luz de los últimos acontecimientos crece la preocupación en Doral y los residentes se preguntan si la situación va a mejorar o tendrán que seguir ocurriendo accidentes para que el público tome consciencia y las calles estén más seguras.

En primer lugar, hay que decir que de acuerdo con los estatutos de la Florida, el operador de un scooter motorizado no requiere poseer un registro, seguro de auto o licencia de conducción y su accionar es limitado, lo cual significa que no tiene permitido, por ejemplo, circular en autopistas. Es deber de quien lo conduce y de padres y acudientes saber todo lo que implica sacar un scooter a la calle y cumplir con las leyes.

“Si usted es padre y va a permitir que su hijo opere un scooter motorizado, sea responsable y asegúrese de que utilice un casco, tenga una luz encendida de noche y que sepa que no tiene derecho de paso como un peatón. Tanto niños como adultos deben estar más alertas, no utilizar el celular y mirar el cruce de peatones en las aceras”, dice la alcaldesa Christi Fraga en entrevista con Doral Family Journal.

Además, hace un llamado a los motoristas para que reporten a la policía cuando un operador de scooter esté obrando mal. “Usted puede decir, por ejemplo, que acaba de ver un scooter en una determinada autopista y la policía enviará a un oficial al lugar porque eso no solo va en contra de las leyes estatales sino que es muy peligroso”.

No conocer leyes como las mencionadas o no aplicarlas, es lo que desencadenó el accidente ocurrido en Doral el 21 de marzo. “Dos menores de edad estaban montados en un scooter, lo cual es ilegal y obviamente hizo que fuera más fácil que perdieran el balance y se cayeran”, explica la alcaldesa.

Este hecho hizo que muchos residentes se preguntaran qué medidas está adoptando la ciudad para mitigar el problema. Al respecto, Fraga comentó que hace más de un año se realizó un estudio para mejorar el tráfico en la comunidad de Landmark, donde ocurrió el accidente, debido al gran volumen de quejas recibidas sobre exceso de velocidad. Éste ya fue enviado al condado y una vez sea aprobado, pasará a un proceso de licitación para iniciar su construcción y obras finales.

Pero al margen de este proyecto, el gobierno local ha estado desplegando campañas educativas para fomentar el buen uso de los scooters. “Estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance y le he pedido al abogado de la ciudad que analice la posibilidad de prohibir los scooters en nuestra ciudad a menores de edad para pedir autorización a Miami-Dade porque generalmente son los que más adoptan conductas imprudentes”, sostiene.

Asegura que Key Biscayne pudo pasar una prohibición en su ciudad porque la mayoría de sus vías son propias, menos Crandon Boulevard, y no del condado, lo cual es el caso opuesto de Doral. Sin embargo, no cree que prohibirlos al público general sea la solución.

“La gente los necesita. Por cierto, cada día se presentan más accidentes en las vías por automóviles que por scooters, ¿vamos a prohibir entonces también los carros?”, reflexiona la alcaldesa, quien dice que la clave está en educar e imponer sanciones severas a quienes incumplan las leyes. “Creo que deberíamos castigar con dureza a los adultos que lleven niños pequeños en un scooter. Eso es como ponerlos en un automóvil sin silla para niños”.

A nivel estatal no está prohibido que los menores operen scooters. Por eso, a través del abogado de la ciudad se está evaluando si es factible o no por las leyes de prelación que Doral imponga esta medida.

De acuerdo con la alcaldesa, mientras todo eso se define, los oficiales de policía están activamente en las calles haciendo cumplir las leyes existentes. “Si, por ejemplo, ven a un menor en un scooter sin casco, lo detienen y llaman a sus padres”, explica.

No obstante, ver cambios positivos a largo plazo depende, en gran medida, de la colaboración de los residentes, quienes además de respetar las leyes pueden enviar correos electrónicos a legisladores y senadores estatales manifestando su preocupación ante la situación con el fin de que las leyes a nivel estatal sean más estrictas.