Más Agua y Menos Sal Mantienen los Riñones Saludables.
Marzo es el Mes de la Salud Renal
Por: María Alejandra Pulgar
@marialepulgar – NAHJ #37172
El 14 de marzo no es solo el Día del Pi, sino también el Día Mundial de la Salud Renal, parte de una campaña iniciada en 2006 por la Fundación Nacional del Riñón, para crear conciencia en todo el mundo sobre la importancia de cuidar los riñones, esos increíbles órganos, fundamentales para la vida, que desafortunadamente la gente solamente nota cuando comienzan a fallar.
“¡No somos nada sin nuestros riñones!” , dice el Dr. Darren Bruck, urólogo y pionero en la cirugía laparoscópica y robótica mínimamente invasiva del tracto urinario en Miami.
“El riñón es el principal filtro de la sangre. En la sangre tenemos diferentes niveles de sales y minerales y ciertas toxinas. Cada vez que el corazón bombea sangre a lo largo del sistema circulatorio, el 25% de esa sangre va directamente a los riñones, que la filtran a través de un sistema muy complejo de túbulos y un aparato de filtración, donde se eliminan las sales y ciertas toxinas, Allí se crea la orina”, explica el Dr. Bruck.
Ese mecanismo mantiene el nivel de minerales adecuado en el cuerpo, permitiendo que todos los demás órganos funcionen correctamente. “Lo que es realmente importante sobre los riñones, es que mantienen las sales en nuestra sangre controladas. Hablamos de sodio, potasio, cloruro, pero el más importante es el potasio, que afecta la función cardíaca y nerviosa.
Cuando los riñones fallan y el potasio aumenta demasiado, los pacientes pueden sufrir un paro cardíaco. “La función clave fundamental de los riñones es mantener buenos niveles de potasio en la sangre para mantener el corazón en movimiento”, dijo el Dr. Bruck.
La mejor manera de cuidar los riñones es una buena dieta y una buena hidratación, y mantener la diabetes y la hipertensión controladas para evitar dañar estos órganos vitales.
¿Es posible vivir con un riñón?
“Para un trabajo tan importante como filtrar la sangre y la orina, tal vez necesitábamos dos órganos, pero podemos vivir con uno”, explicó el Dr. Bruck. “Tratamos a muchos pacientes que tienen tumores renales con cirugía de extirpación renal. Otras personas donan un riñón a un ser querido y viven el resto de sus vidas sin ningún problema”.
“El riñón se hincha un poco inicialmente mientras duplica la carga y se acomoda, pero si es posible vivir solo con uno”. Cuando ambos riñones fallan y dejan de funcionar, las personas deben someterse a diálisis, un riñón artificial, un tratamiento que cada 48 horas filtra toda la sangre en su cuerpo.
“En hemodiálisis, las personas van al centro tres veces por semana para que la sangre se filtre por una fístula en su sistema vascular”, explicó el Dr. Bruck, “también hay la diálisis peritoneal, donde hay un catéter de acceso a la cavidad abdominal, y el líquido se vierte en la cavidad abdominal para permitir la transferencia de líquidos y sales dentro y fuera del cuerpo “.
La calidad de vida es muy difícil para las personas que necesitan diálisis. Pero si no reciben el tratamiento sería una sentencia de muerte, a menos que reciban un trasplante de riñón.
Según la Fundación Americana de Transplantes, aproximadamente 115,000 personas en EEUU están en la lista de espera de trasplantes, y se agrega un nombre cada 10 minutos. Desafortunadamente, un promedio de 20 personas mueren cada día a la espera de un nuevo riñón. Vale la pena cuidar nuestros propios riñones, por nuestro propio bien y para ayudar a los demás, si nos convertimos en donantes voluntarios.
¿Debo ir al Nefrólogo o al urólogo?
Los médicos primarios son los primeros en detectar problemas de los riñones y dirigen a los pacientes al especialista adecuado.
“Los nefrólogos son los médicos para la función renal”, dice Dr. Bruck. “Se encargan de los problemas funcionales. Tratan a los pacientes con diálisis y ajustan los medicamentos para asegurarse de que los riñones tengan un buen flujo de sangre y que no se dañen. Ayudan a los pacientes con su dieta, manejo de fluidos y manejo de sal”.
“Los urólogos, tratamos las enfermedades quirúrgicas de los riñones. Nuestro objetivo es protegerlos y realizar cirugías en todo el tracto urinario. Tratamos cálculos renales que pueden obstruir el riñón, cánceres, tumores y otras enfermedades de todos los órganos del sistema”.
Preservar la función renal para una larga vida
Urólogos y nefrólogos trabajan en conjunto con pacientes con enfermedades renales que también requieren procedimientos quirúrgicos. A través de diferentes pruebas de sangre, orina e imágenes, determinan el estado del paciente y desarrollan un protocolo para ayudarlos a mejorar y mantener la salud de sus riñones.
El Dr. Bruck recomienda que las personas con diabetes o presión arterial alta controlen regularmente su función renal, ya que ambas afecciones ponen una tensión adicional en los riñones.
También recomienda “Mejorar la circulación, la dieta y el ejercicio y evitar la deshidratación. Cuando nos deshidratamos, nuestra circulación sufre, nuestro volumen de sangre se reduce y no obtenemos una buena perfusión en los órganos. Y los riñones necesitan trabajar más para concentrar la orina; Los órganos tienen que trabajar horas extras y sufren”.
“La deshidratación es un problema extremadamente común en el sur de Florida. Mi recomendación número uno para los pacientes es beber más agua, más líquidos. Mantenga sus órganos hidratados”. Una buena regla general es controlar qué tan clara está la orina. Si está muy concentrado, beba más agua. Y vaya al baño con frecuencia para evitar el desarrollo de una vejiga hiperactiva y otras afecciones relacionadas.
“Enseñar buenos hábitos alimenticios a los niños pequeños, evitar comer demasiado la sal, evitar la deshidratación” les ayudará a prevenir problemas renales en el futuro.
“Es más fácil decirlo que hacerlo, pero todo apunta que a una dieta saludable y hacer ejercicio cardiovascular, haciendo que la sangre circule hacia los riñones y lleve oxígeno para mantenerlos saludables. Dieta, fluidos y ejercicio, y un chequeo una vez al año. “Controle su presión arterial regularmente, un examen de rutina anual con el médico y el manejo del estrés también, porque el estrés afecta su presión arterial” concluyó el Dr. Bruck.