Nuevo FAFSA en el horizonte.

Por:  Dr. Belinda Leon, Senior Advisor with USP – University Scholar Program

La Solicitud Gratuita de Ayuda Federal para Estudiantes (FAFSA, por sus siglas en inglés) es el formulario que todas las familias deben completar anualmente para determinar si su estudiante universitario es elegible para recibir ayuda financiera para ayudar a pagar los costos escolares.

FAFSA analizará la situación financiera de cada familia para determinar si el estudiante puede recibir becas, préstamos o pago de estudio y trabajo. El Gobierno Federal, el estado de residencia del estudiante y la universidad del estudiante, utilizan la información proporcionada en FAFSA para decidir cuánto dinero otorgar para los gastos universitarios. También hay organizaciones privadas, como entidades que otorgan becas, que utilizan los datos de FAFSA. Esta solicitud generalmente se abre anualmente el 1 de octubre y se recomienda a las familias que completen el formulario lo antes posible porque existe una ventaja al obtener más fondos si lo envían temprano.

Sin embargo, este año (2023), el formulario se retrasó hasta diciembre. ¿Por qué? Porque el formulario FAFSA se está modificando para que sea más corto, más sencillo y con una nueva fórmula para analizar datos financieros. ¡O eso dicen!

Desde 2021, FAFSA ha sufrido varios cambios. Este año, el principal cambio en FAFSA está relacionado con la fórmula de análisis de necesidades financieras y la concesión de las Becas Pell. Una Beca Pell es dinero otorgado a un estudiante universitario con necesidades financieras que está obteniendo su primera licenciatura. No es necesario reembolsar una beca Pell y, para el año 2023-2024, un estudiante podría recibir hasta $7395.

Otro cambio importante es que el término “Contribución familiar esperada” (EFC, por sus siglas en inglés) se cambiará a “Índice de ayuda estudiantil” (SAI). EFC era una cifra en dólares que indicaba cuánto dinero se esperaba que una familia contribuyera a los costos universitarios. Este número no reflejaba un pago real, sino que era una guía para determinar cuánta ayuda necesitaba la familia para cubrir los costos universitarios. El nuevo SAI, podría ser un número negativo, será un número que es un código de cuánta ayuda financiera califica para un estudiante según las respuestas de la FAFSA, así como los datos almacenados por el Servicio de Impuestos Internos de los formularios de impuestos presentados anteriormente. Este año, al completar FAFSA, los padres deberán vincular su FAFSA a la declaración de impuestos federales sobre la renta.

Un cambio particular este año que preocupa mucho a esta autora, es que el número de niños en la universidad ya no se considerará en el cálculo del SAI. Anteriormente, si una familia tenía más de un estudiante en la universidad, FAFSA tomaba en consideración los gastos y los usaba como factor para otorgar ayuda financiera a todos los estudiantes de la familia. Se recomienda que si cree que no está recibiendo suficiente ayuda financiera para sus estudiantes, asegúrese de hablar con el asesor de ayuda financiera de la universidad a la que asiste. El asesor financiero evaluará su situación particular y podría utilizar su criterio profesional para ajustar el FAFSA y calificarlo para recibir más ayuda financiera.

Hay algunos cambios más a tener en cuenta: Sí el ingreso bruto ajustado de los padres o de un estudiante independiente es inferior a $60,000.00, entonces los activos se excluyen de la fórmula de necesidad financiera. Si tiene algún tipo de cuenta de ahorros para educación, solo necesita informar sobre la cuenta de ese estudiante, no sobre todos los ahorros de sus estudiantes. Si usted es un padre que recibe manutención de los hijos, esa manutención ahora cuenta como ingreso. Si tiene su propio negocio, el valor neto del negocio se informa independientemente de la cantidad de empleados que tenga. Y, si tiene una finca, que no es su residencia principal, debe incluirse el valor de dicha finca.

Un próximo cambio positivo en el FAFSA es el aumento en los montos del subsidio de protección de ingresos (IPA).

IPA se refiere a una porción específica de los ingresos de un padre o estudiante que está “protegida” del cálculo de la ayuda financiera. Los ingresos siempre se consideran cuando se determina el monto de la ayuda financiera; Sin embargo, una cierta cantidad de sus ingresos no contará en la fórmula porque se supone que necesitará esa cantidad para cubrir las necesidades básicas. Se espera que, como estudiante, puedas ganar hasta $7000 en salarios y no se descontará de la necesidad de ayuda financiera. Los padres y estudiantes monoparentales también verán un aumento en el IPA.

Al igual que con la implementación de cualquier programa del Gobierno Federal, es importante estar preparado para este nuevo proceso y procedimiento con FAFSA. Los padres deben reunirse con su asesor financiero o contador para revisar su situación financiera personal y comprender cómo afectará el nuevo cálculo de la FAFSA.

Siempre es posible planificar con anticipación considerando cuidadosamente cómo FAFSA considerará sus datos de impuestos sobre la renta de dos años anteriores. ¡Con la ayuda financiera para estudiantes, la preparación y el ahorro son clave!