Mental Health: The Next Frontier in Schools

 

 

Para leer en Español

 

It is disheartening that it takes a massacre like Marjory Stoneman Douglas High School and Sandy Hook for a community to begin to open their eyes and become proactive. Back in April 2017 a proposal was presented to the Florida Constitution Revision Commission (CRC) to amend the Constitution of Florida and bring emotional literacy into the school system. It was rejected. School shootings are obviously a multifaceted issue. “We have completely neglected many areas for decades: gun control, school safety, family values and the biggest, however, the simplest of all- to teach our children in schools how to develop healthy mental habits. This is the foundation that is lacking and trying to build a home without footing is exactly what we are attempting to do in our society”, said Beatriz Martinez-Penalver, Founder of Triumph Steps, an emotional literacy curriculum.

Martinez-Peñalver has said, “Never in my career as a psychotherapist have I ever had a client come in and tell me that they are depressed because they forgot high school trigonometry or history facts. They come in for a multitude of issues that share a common denominator, which is that they want to achieve happiness.” Martinez-Peñalver believes that many of her patients’ issues could have been prevented if they would have been taught proper mental health habits from an early age. She is an avid believer that happiness is a skill that can be taught and a choice that can be made. Children just need access to tools to help them build the correct thought patterns early on. She is an activist and a big proponent of bringing emotional literacy curriculums into the schools. She strives to deter today’s youth from ending up in her office, or any office like hers, for issues that they could have combatted themselves by learning the correct thought patterns from the start.

While emotional literacy curricula, like Triumph Steps, is slowly making its way into very few schools which have enough foresight to invest in their students’ mental wellness, a real standard for emotional literacy education in American schools is still missing. Not even after the many massacres that we have witnessed, the government has been able to realize that if we spend on mental health prevention services we would not have to spend over 200 billion dollars a year to treat mental health disorders.

Millions of dollars are also spent on research that is telling us that our brain is not a fixed hardwired organ. Our brain has neuroplasticity. This means that the brain changes depending on the direction of our thinking. Neuro-connections change moment by moment depending on the thoughts and the feelings attached to them.

If we are to pay attention to the research, we can easily deduct that we can teach these principles and what better place to start than in schools. For many years this is what cognitive behaviorist do in therapy. Cognitive behavioral therapy is the most well- researched psychotherapy.

We can teach our children that all of us have been given different circumstances in life and we cannot control that; however, we can control how we think about the different events in life and how to react to them.

Developing these mental skills can be taught in school, just as we teach science, math or language arts. We have always thought that managing emotions is a very complicated thing to do, however when we understand that emotions emanate from thinking it becomes a much more manageable task. If we manage our thoughts we can direct our emotions and therefore our lives.

There are programs now that can be brought to schools to guide children develop healthy mental habits. The beauty of these programs is that they require minimal training of teachers. The programs are developed by mental health professionals and with the advances in technology and the support of school counselors, they can be delivered in an effortless and easy way, making sure that they give students the benefits to help them develop the extraordinary life they deserve.

It is our responsibility to push humanity forward and prevent another massacre in our schools. We can make sure that our children are given the necessary tools to be happy in life. After all they are 25% of our population now, but 100% of our future.

 

———–—– En Español ————–

 

Salud mental: la próxima frontera en las escuelas

 

Es una gran desilusión que las tragedias como la reciente masacre en Marjory Stoneman Douglas High School y Sandy Hook por fin despiertan a una comunidad a tomar acción. Desde abril de 2017 una propuesta fue presentada al Florida Constitución Revisión Comisión (CRC), una comisión para revisar e incorporar modificaciones a la constitución de la Florida y traer alfabetización emocional al sistema educativo. Fue rechazada. Los atentados y matanzas en los colegios comprenden de una situación complicada con múltiples variables. “Hemos ignorado muchas áreas por varias décadas: el control de armas, la seguridad escolar, los valores familiares, y la mas grande, aunque la mas sencilla de todas: la enseñanza a nuestros jóvenes en los colegios de como desarrollar hábitos sanos mentales. Esta es la base que no existe y tratando de construir una comunidad sin una base fuerte es exactamente lo que estamos tratando de hacer en nuestra sociedad,” dijo Beatriz Martinez-Peñalver, Fundadora de Triumph Steps, con un currículo de alfabetización emocional.

Martinez-Peñalver comenta, “Nunca en mi carrera de más de 25 años como sicoterapista he tenido un paciente que me venga a mi diciendo que esta deprimido porque se olvidó de su lección de trigonometría de bachillerato o datos de historia. Me ven por una multitud de temas con el mismo propósito en común de cómo obtener la felicidad.” Martinez-Peñalver piensa que muchos de sus clientes hubieran podido prevenir una variedad de problemas y ansiedad si se les hubieran enseñando hábitos positivos para su salud mental desde pequeños, así como una clase de geometría o literatura enseña matemáticas y letras. Ella cree que la felicidad es una habilidad que se puede enseñar y elegir. Los niños solamente necesitan el acceso a las herramientas para ayudarlos a crear un proceso de pensar positivamente desde un comienzo.  Ella es una activista y gran defensora de la incorporación de la alfabetización emocional en los currículos de colegios… Martinez-Peñalver se esfuerza por prevenir que la juventud termine en su oficina o oficinas como la de ella, por asuntos que ellos mismos hubieran podido resolver solos al aprender modelos de pensamiento correctos.

Mientras programas de alfabetismo emocional, como Triumph Steps, está formando parte en el currículo de algunos colegios con la visión de la necesidad de invertir en la salud mental de sus estudiantes, un estándar real no existe en el sistema educativo de Estados Unidos. Ni siquiera después de tantos masacres que hemos presenciado, ha hecho que el gobierno invierta en programas preventivos de salud mental, disminuyendo un gasto que sobrepasa los 200 billones de dólares al año en el tratamiento de enfermedades mentales.

Millones de dólares también van hacia la investigación que nos dice que nuestro cerebro no es un órgano fijo. Nuestro cerebro tiene neuroplasticidad. Esto significa que el cerebro cambia dependiendo de la dirección de nuestros pensamientos. Conexiones neurológicas cambian cada instante dependiendo de los pensamientos y los sentimientos conectados a ellos.

Si ponemos cuidado a los estudios, podemos fácilmente deducir que podemos enseñar estos principios idealmente en los colegios.  Por varios años esto es lo que se trabaja con los especialistas en comportamiento cognitivo. Terapia de comportamiento cognitivo es la sicoterapia más estudiada. Podemos enseñarle a los niños que todos hemos nacido con distintas circunstancias en la vida y eso no podemos controlar, pero sí podemos controlar nuestra forma de pensar sobre los distintos eventos en la vida y cómo reaccionar consecuentemente.

El desarrollo de estas herramientas puede ser implementado en los colegios, así como enseñamos ciencias, matemáticas o literatura. Siempre se ha pensado que el manejo de estas emociones es algo muy complicado de realizar, pero cuando entendemos que emociones surgen de nuestra forma de pensar, se convierte en algo que se puede manejar. Si manejamos nuestros pensamientos, podemos dirigir nuestras emociones y así nuestras vidas. Existen programas ahora que se pueden incorporar en los colegios para guiar a los estudiantes a desarrollar hábitos sanos mentales. La belleza de estos programas es que requiere un entrenamiento mínimo para los profesores. Los programas son desarrollados por profesionales de salud mental con los avances en tecnología y el apoyo de los consejeros de los colegios. Son presentados de manera gradual y natural, asegurando que le brindan a los estudiantes los beneficios para ayudarlos a desarollar la vida extraordinaria que se merecen. Es nuestra responsabilidad de impulsar a la humanidad adelante y prevenir otra masacre en nuestros colegios. Podemos asegurarnos que nuestros hijos tengan las herramientas necesarias para ser felices en la vida. Comprenden del 25% de nuestra población ahora, pero serán el 100% de nuestro futuro.