¿La Inflación está impactando su salud?

 

Por: María Alejandra Pulgar

 

La inflación ha impactado casi todos los aspectos de nuestras vidas en los últimos dos años. Desde los alimentos hasta la gasolina y la renta, el aumento de los precios ha golpeado duramente los bolsillos de todos los estadounidenses; atención médica y seguros no son la excepción.

 Una encuesta reciente realizada por Debt.com, una corporación de educación y resolución de deudas con sede en Florida, encontró que más de la mitad de los estadounidenses tienen deudas médicas, y el 40% dice que está relacionada con la inflación. Más allá del hecho de que las personas no pueden pagar la atención médica, ni siquiera con un seguro, la encuesta encontró que el 34% de los estadounidenses “ha retrasado la atención médica debido al costo, y el 32% se ha saltado el pago de sus facturas médicas”. La mayoría de esas facturas son copagos de recetas o servicios médicos, costos de coaseguro o gastos de bolsillo no cubiertos por las pólizas de seguro.

El impacto de la inflación en el costo de los medicamentos recetados es una gran preocupación para muchos estadounidenses. Según un artículo reciente de Forbes, el costo de los medicamentos recetados ha aumentado un 33% durante la última década. Este aumento en el costo dificulta que las personas puedan pagar los medicamentos que necesitan para controlar enfermedades crónicas como la diabetes, las enfermedades cardíacas y el asma.

Muchos se ven obligados a elegir entre pagar sus medicamentos u otros gastos esenciales como el alquiler y la comida. Retrasar o ignorar el pago de facturas médicas puede terminar afectando no solo su puntaje crediticio, sino que el estrés que esto genera puede afectar su salud mental y su calidad de vida. La asistencia sanitaria no es un lujo selectivo.

Los efectos de la inflación en la salud pública no se limitan a las facturas médicas y los medicamentos recetados. También está afectando el costo de las opciones de alimentos saludables. Según un informe del USDA, el costo de las frutas y verduras frescas ha aumentado un 40% durante la última década. Este aumento en el costo está dificultando que muchas familias puedan permitirse opciones más saludables, lo que puede conducir a un aumento de los problemas de salud relacionados con la dieta, como obesidad, diabetes y enfermedades cardíacas.

Este problema de salud pública no se limita sólo a Estados Unidos. Es una situación global que está afectando a personas de todo el mundo. Según un informe de la Organización Mundial de la Salud, el aumento del costo de la atención médica debido a la inflación está dificultando que muchos países brinden servicios de salud esenciales a sus ciudadanos. Esto está provocando un aumento de las muertes evitables y una disminución de los resultados generales de salud en todo el mundo.

 

¿Por qué están aumentando los costos médicos en los EE. UU.?

Se espera que los costos de atención médica, incluidos los servicios médicos, seguros, medicamentos y equipos médicos, aumenten alrededor del 8,5% para 2024. Aunque la inflación alcanzó su punto máximo en 2022, el impacto en los artículos relacionados con la salud se retrasa debido a los acuerdos de precios en los contratos entre compañías de seguros. y los proveedores duran varios años antes de que puedan actualizarse con la inflación.

Los costos operativos para los proveedores de servicios médicos aumentaron porque los salarios y los costos de suministros se vieron afectados por la pandemia, especialmente los costos laborales del personal clínico. Estados Unidos se enfrenta a una escasez de enfermeras, técnicos y médicos titulados que exigen salarios más altos por su trabajo. Otro factor son los crecientes costos de los suministros, equipos, servicios, nuevas tecnologías y tratamientos y medicamentos innovadores. Si los proveedores no pueden compensar sus costos operativos y mantener la sostenibilidad financiera, tendrán que hacer recortes, lo que en consecuencia puede afectar la calidad de la atención que brindan a los pacientes.

Los proveedores ahora están negociando con las compañías de seguros para aumentar sus costos y trasladarlos a los consumidores mediante el aumento de sus primas. Según Aon, una empresa de consultoría en gestión de riesgos y salud, las primas de seguros de los empleados “aumentaron una media del 1,7%” en 2023, mientras que los gastos como deducibles, copagos, etc. de los empleados crecieron un 5,7%. Los trabajadores necesitan presupuestar esos gastos no cubiertos, porque de lo contrario, aunque tengan seguro, el acceso a la atención preventiva se vuelve difícil si no pueden pagar copagos por citas médicas, laboratorios u otros servicios.

 

¿Cómo manejar los costos médicos?

Las empresas están tratando de encontrar mejores ofertas de primas y precios más bajos para los programas de seguro médico que ofrecen a sus empleados. Algunos incluso están considerando la implementación de centros de excelencia para brindar a los empleados atención médica de alta calidad a un costo mínimo.

Los empleados que tienen un plan de seguro patrocinado por la empresa deben comparar las diferentes opciones disponibles y elegir la que mejor se adapte a sus necesidades y presupuestos. Aquellos cuyo empleador no ofrece un plan de seguro pueden verificar en el portal HealthCare.gov si califican para recibir subsidios o créditos fiscales.

Las facturas médicas pueden ser negociables con los proveedores si no puede pagarlas de inmediato. Puede llegar a un acuerdo y establecer un plan de pago o buscar asistencia financiera. Muchas organizaciones ofrecen subvenciones o préstamos para cubrir los gastos de determinadas afecciones o tratamientos. Para las recetas, muchos laboratorios ofrecen tarjetas de descuento o programas que hacen que los medicamentos sean más asequibles para los pacientes. Pregúntele a su proveedor cuando hable sobre el uso de ciertas recetas que podrían ser demasiado costosas incluso con seguro.

No necesita sentirse abrumado por su deuda médica. Algunas organizaciones lo ayudan a consolidar su deuda médica, evaluar su situación, crear un presupuesto, negociar con sus acreedores y analizar sus opciones para administrar su deuda e incluso evitar la quiebra.

La inflación de la atención médica no tiene por qué enfermarlo ni empeorar su salud física o mental. Hacerse cargo y organizar las facturas médicas requiere paciencia y atención al detalle. Cuanto antes pida ayuda y hable con su seguro y su proveedor, podrá organizar su proceso médico y tener acceso a la atención que necesita de la forma más económica posible.